Lucas vuelve a respirar
Lucas vino hace unos días a consulta porque sus dueños lo veían respirar mal. En la exploración se le notaba fatigado y jadeante. ¡Cuál fue nuestra sorpresa al hacerle una radiografía! Lucas tenía una hernia diafragmática, un desgarro en el diafragma, y la mayor parte de los órganos que debían estar en el abdomen se habían colado en el tórax, comprimiendo sus pulmones y no dejándolo respirar.
Ante la gravedad del estado de Lucas, se decidió dejarlo hospitalizado esa noche y se le sometió a cirugía al día siguiente. Se le hizo una laparotomía, accediendo así al abdomen. Lucas tenía todo el intestino, el bazo, el páncreas y gran parte del hígado dentro de la cavidad torácica. Con mucho cuidado, los órganos se fuero extrayendo y colocando en su sitio. Por último, se suturó el defecto en el diafragma con una sutura no absorbible, para evitar que la hernia vuelva a abrirse. Se le colocó también un drenaje torácico para ir sacando el aire y el líquido que pudiera acumularse entre las paredes del tórax y los pulmones durante las horas siguientes. Durante toda la cirugía, Lucas se mantuvo estable y sus constantes estuvieron dentro de la normalidad. Tras pasar la noche con oxígeno y bajo observación estrecha, fue dado de alta al día siguiente, puesto que se encontraba bien, respiraba con normalidad, y las radiografías mostraban una evolución satisfactoria.
Lucas es un campeón y se está recuperando de maravilla. Ahora ya está preparado para jugar con sus dueños y su compañero gatuno. ¡Enhorabuena, has sido un valiente!